miércoles, 27 de abril de 2016

MENOTTISMO Y BILARDISMO EN EL MOVIMIENTO REVOLUCIONARIO


Por Baku Nico
En el fútbol argentino existe una disputa histórica entre dos sectores que representan dos concepciones estratégicas (y de vida) completamente distintas y encontradas: el menottismo (conjunto de concepciones y propuestas del técnico Cesar Luis Menotti) y el bilardismo (conjunto de concepciones y propuestas del técnico Carlos Salvador Bilardo).
El ideario menottista se basa en un juego prolijo, correcto, atado a las reglas, de fuerte sesgo individual (un “10 fuerte y vistoso”), que despliegue un juego bonito y elegante. Es el futbol “champagne”.

En cambio el bilardismo se basa en unas tácticas más elásticas, que van desde el resultadismo (aguantar el partido, jugar con un solo delantero mientras se va ganando) hasta la ruptura de las normas (el bidón adulterado, los pinchazos con alfiler), ambas en pos del triunfo. Pero no solo, sino que también es el estudio del enemigo (los famosos videos donde se estudiaba a cada jugador rival)
Ambos sacaron campeones a la Argentina:  Menotti en el 78 (de la mano de las fuerzas oscuras que regían a la Argentina) y Bilardo en el 86 (de visitante,  con todo en contra, y logrando vengar simbólicamente la derrota militar de Malvinas en el 82).
Menotti propugnaba un “maradonismo ortodoxo” que no consiguió; Bilardo, sin el culto laudatorio al 10, incluso teniendo discusiones y diferencias con este jugador, logró el maradonismo en sí, el maradonismo bilardista: gol con la mano primero, y luego, el gol del siglo (ambos contra el imperialismo inglés).
Vamos a ver que todo esto también ocurre en el campo revolucionario. (Este es un texto a favor del bilardismo aplicado al movimiento revolucionario, es decir, es un texto a favor de la heterodoxia.
Tiene algo de humor porque es la forma en que más me gusta relacionarme con mis compañerxs, aunque trata temas importantes. A partir de esta distinción futbolística pretendo hablar de lo que ocurre en Kurdistán y otras partes del globo, tocando aquellas cuestiones teóricas que más debate generan).
Antes decía que Menotti propugnaba un maradonismo teórico que solo consiguió Bilardo en la práctica, y sin proponérselo. Esto es porque Maradona hizo carne los preceptos ideológicos y estratégicos del bilardismo.
Aplicado a la discusión sobre el sujeto histórico en la revolución de Kurdistán, podemos decir que la revolución kurda consigue liberar a la clase obrera (el “10 vistoso” de Menotti) sin haberle hecho alabanzas ni loas ni cantos ni poemas (o sea poniéndolo en segundo plano).
En cambio aquellos sistemas que propugnaban un sujeto obrero central (URSS, China, Cuba, etc.), solo consiguieron perpetuar la explotación y la opresión, permutando el saqueo patronal por la explotación estatal, manteniendo la propiedad privada e incluso generando variantes “socialistas” del taylorismo y la súper explotación, las horas extras, etc. (el llamado “stajanovismo”).
En cambio el pueblo kurdo, que no ubica tan centralmente a la clase obrera, o que en todo caso, lo hace a través del situamiento en primer plano de la mujer (trabajadora, proletaria), consigue un desclazamiento, una desproletarizacion real en una sociedad sin clases (el objetivo de todo movimiento comunista).
Todas las personas que visitan Rojava coinciden en la igualdad pareja de sus habitantes (tanto para compartir la riqueza como las carencias). Se ha conseguido un sistema de cooperativas sin patrón y gestión directa de la producción que tiene como premisa la donación de un cuarto de las ganancias a la comuna a la que está adherida la cooperativa.
Esto es o se acerca bastante a lo que lxs anarquistas han denominado “comunismo libertario”, una forma de redistribución y repartición “ciega”, o al menos “tuerta”, no tan atada al cálculo ni al beneficio individual o corporativo, un dar sin esperar a cambio. El intento de establecer servicios gratuitos pareciera cerrar el escenario para la desproletarización.
La expresión “dictadura del proletariado” presenta varios inconvenientes, entre ellos que da a entender que el proletariado (y por lo tanto la burguesía), siguen existiendo prolongadamente en el tiempo. Por tal razón Ernesto Guevara sustituyó tal concepto por el término “construcción del socialismo”.
La alabanza al proletariado (en particular el proletariado industrial), es el primer obstáculo para la liberación del proletariado. ¿Cómo vamos a generar un sistema de liberación del proletariado si nuestras tesis magnifican y alaban su condición proletaria (o sea, su condición de explotado)?
Lxs kurdxs encontraron una respuesta: el proletariado se va a liberar cuando pierda centralidad téorica. No es la única respuesta, hay otra (de raíz antropológica): el proletariado se va a liberar cuando sea una fuerza femenina, es decir, cuando haya abandonado la masculinidad.
No hace falta mucho esfuerzo para darse cuenta de que los que inventaron la teoría de la centralidad obrera eran todos varones. Esto es una forma semiconsciente de autoperpetuarse en el primer plano de la historia.
Si uno ve el “top ten” de los mayores asesinos de la Historia va a ver 10 varones. Pero lo mismo ocurre con con el top 50. Y con el top 100. Hay que correrse del eje. Lxs kurdxs resuelven el problema de la organización económica poniendo a la mujer en el centro de la economía, de las cooperativas y de las comunas.
El problema de la centralidad del proletariado, en particular su variante industrial, está relacionado con el economicismo, otro mal típicamente menottista. La falta de determinada información histórica de la que adolecían los teóricos del siglo XIX, los llevó a consideraciones no del todo exactas, o por lo menos incompletas.
Durante el siglo XX el antropólogo francés Pierre Clastres demostró que hubo imperios (grandes estados) miles de años antes de la roturación de la tierra y el cultivo sedentario. Lo mismo ocurre con el patriarcado, un sistema que ha existido (y aún subsiste) en tribus y federaciones de grupos colectivistas (sin propiedad privada de la tierra y otros bienes).
Es imposible explicar el surgimiento del patriarcado, y llegar al desarrollo de nociones feministas, a través de una visión economicista. Esto se debe a que el ejercicio del poder masculino y patriarcal significa un “goce en sí mismo” para el que lo ejecuta, independiente de variables económicas la mayoría de las veces:
La mayor parte de las veces no se golpea, no se amenaza o no se viola para “explotar mejor” o para “disciplinar aún más el trabajo alienado”; se lo hace por puro ejercicio del poder, por el goce que éste representa.
La mayoría de los teóricos de la nueva izquierda de los 60 y 70 han buscado formas de mantener la teoría de la ganancia del marxismo pero extendiéndola al terreno extra-económico: “capital simbólico” (Bourdieu), “plus de goce” (Lacan) y otras, abordaban la problemática del poder utilizando el aparato teórico marxista.
En lo particular, me cuesta entender cómo un operario que fabrica escarbadientes (y que solo realiza una parte mínima en la fabricación del mismo), tiene más importancia estratégica que un cirujano o un docente.
Mi pensamiento tiende a ubicarlos en una situación de importancia pareja. Propongo que hablemos de proletariado en sentido amplio, o sea de todos los oficios. Desde esa perspectiva, en Kurdistán no falta sujeto sino al contrario: están todos lxs trabajadores en plano de igualdad (dentro de su cooperativa laboral, y políticamente dentro de la comuna).
El capitalismo ha obrado durante el último siglo de manera tal de prevenir revoluciones proletarias triunfantes. Ha dado sucesivos “salariazos” al proletariado industrial mundial de manera de alejarlos de sus compañerxs de clase en el campo, de los parados, de los trabajadores informales, de los trabajadores no calificados, etc.
El capitalismo renuncia a una tasa considerable de plusvalía en forma de sueldos desde donde  intenta lograr pacificación y acatamiento, no sin relativo éxito. Desde ya esto no significa que haya que abandonar a este sector tan importante; al contrario implica cierta creatividad teórica para, sin abandonar las demandas clásicas, repensar puntos nodales de acción.
Por ejemplo, en muchas siderúrgicas, las listas sindicales opositoras (clasistas) operan con relativa libertad y visibilidad, en cambio aquellas agrupaciones que denuncian la contaminación y los casos de cáncer tanto entre la población obrera de la empresa como de lxs vecinxs, se ven obligadas a operar clandestinamente, bajo amenaza de despidos y represalias violentas.
La importancia del aspecto económico (traducido en sueldos, convenios, lucha contra los despidos, etc.) se explica por el simple hecho de que en la economía está en juego nuestra vida (sin comida no vivimos; si no llegamos a fin de mes no vivimos, etc.)
Sin embargo el capitalismo está tan agotado como sistema que diariamente se obligado a poner en práctica formas de explotación de los recursos y las personas que destruyen miles de vidas cotidianamente como producto de la contaminación y el envenenamiento (por ejemplo con el caso del fracking, que requiere del uso de cianuro).
Es importante entender que el capitalismo está obligado a utilizar estos mecanismos destructivos a fin de perdurar en el tiempo. Esto los lleva a una especie de nihilismo corporativo dedicado a la ganancia rápida sin importar siquiera las consecuencias de acá a 20 años.
De esta manera el capitalismo genera, sin proponérselo, insurrecciones revolucionarias comunalistas que tienen como eje la problemática ecológica, esto es, la defensa de los recursos y de la gente.
Por ejemplo la comuna de Keratea, en Grecia (una pequeña villa agrícola que ha conseguido diversos niveles de autonomía del estado y autogestión económica) ha surgido en 2011 como respuesta al intento del gobierno (que intentaba recibir dinero como sea para salir de la crisis) de poner un vertedero para toda la basura europea justo en dicha ciudad.
El pueblo de Keratea se insurreccionó, enfrentando durante meses a la policía, y aprovechó el vacío para poner en pie organismos y proyectos autogestivos con suerte diversa (el más vistoso y triunfante, el de la uva).
La comuna de Atenco, en México, surge como respuesta a la voluntad del gobierno de Vicente Fox de robar 5000 hectáreas de tierra para poner un aeropuerto. Pero sin duda el caso más visible lo constituya la guerrilla nigeriana MEND (Movimiento por la Emancipación del Delta del Níger), una guerrilla comunitarista y ecologica formada por civiles de los pueblos igbo, tallensi y tiv, tradicionales pueblos sin estado del Delta del Níger.
Esta guerrilla MEND durante años ha luchado contra las multinacionales Exxon Mobile, Agip y Shell que operaban en la zona contaminando las aguas del Níger y generando muertes en niñxs y adultxs.
La táctica del MEND es la vieja táctica del luddismo: destruccion de infraestructura. Ellxs no pueden esperar a que ls operarixos de Shell, Exxon Mobile y Agip (que ganan altísimos sueldos, son blancos y viajan en charters para no cruzarse con sus pares negros) se auto organicen, luchen, tomen la planta, formen un comité de empresa y diseñen un mecanismo ecológico de funcionamiento (si es que esto es posible); necesitan acabar con el problema de inmediato.
Entonces un lanzacohetes destruye una tolva. Y chau tolva. No es casual entonces que la variante más reaccionaria e inhumana del ISIS en África (Boko Haram) opere justo en el Delta del Níger, ya que el imperialismo teme que el MEND pueda transformarse en una fuerza revolucionaria anticapitalista en la región.
Pocos años atrás se mostraron públicamente usando banderas negras y rojas e implementando el lema de las brigadas internacionales de España 36: “for our freedom and yours”, por vuestra libertad y la nuestra). Actualmente el MEND es la única fuerza que combate a Boko Haram (los perros defensores de las petroleras) con las armas (igual que lxs kurdxs con respecto al ISIS).
Otra cuestión con la cual podemos enredarnos es con el uso del término “socialismo”. En el marxismo dicha etapa es equivalente a la dictadura del proletariado; pero lxs kurdxs no pueden esperar, no pueden cumplir con lo que dice el reglamento, no tienen tiempo humano para 1) tareas democrático burguesas, 2) socialismo, 3) comunismo.
Necesitan liberarse aquí y ahora, entonces experimentan de manera directa con el punto número 3, con errores y contradicciones, pero lo buscan y en buena medida lo consiguen. Entonces pensar en Kurdistán como algo que puede ir “en vías al socialismo” sería tratar de que desanden parte del camino andado para que recorran de nuevo “el camino correcto”.
El fin del socialismo en Cuba, la ominosa penetración de Coca Cola y Rolling Stones nos llevan a buscar lo que sirve. ¿Y qué sirve? Bueno, la Comuna de Chiapas existe hace 22 años, viven 120.000 trabajadores/as dentro de ella, y no tiene ninguna multinacional, no emplea trabajo asalariado, no tiene presxs políticxs ni un solo caso de fusilamiento interno.
Sin idealizar, se vive en un clima de franca igualdad (nadie tiene un plasma en Chiapas, se equipara para arriba o para abajo pero siempre en forma ecuánime). Un viejo chiste eslavo decía: “¿Cuál es la diferencia entre los dirigentes soviéticos stalinistas y los dirigentes yugoslavos titoístas?, que en la URSS los dirigentes viajan en limusina, en cambio en Yugoslavia el pueblo viaja en limusina a través de sus dirigentes.”
La comuna de Chiapas pone fin a eso, la foto del Sub Marcos con el trapeador de piso pone fin a la jerarquía en los proyectos revolucionarios.
Y no es curioso que este modelo este siendo imitado cada vez más por más y más movimientos (por ejemplo la reciente Comuna de Barbacha, en la Kabylia argelina, una comuna antiestatal y anticapitalista que toma el modelo de Chiapas y se nutre de la tradición histórica de sus organismos asamblearios tradicionales, los aarch).
Otro elemento que tenemos que tomar en cuenta es la tradición organizativa y cultural de los pueblos (lo cual también es un argumento en contra de la centralidad de la teoría revolucionaria).
No es casual que lxs chiapanecxs, oaxaqueñxs, purépechas y otros pueblos en México, lxs bereberes de la Kabylia, lxs kurdxs, lxs igbo y los ancestralmente democráticxs griegxs estén liderando las luchas revolucionarias en el mundo y llevando a cabo sistemas de autogobierno y autogestión en medio de la peor crisis capitalista de la historia.
El capitalismo, para funcionar necesita un alto grado de disciplinamiento (en particular en la industria pesada), y estos pueblos llevan en su historia elementos probatorios de que otro tipo de sociedad, más humana, sana, libre e igualitaria es posible.
Con lo cual la teoría revolucionaria pierde centralidad, y cede su lugar a los hechos. Esto no quiere decir que haya que dejar de hacer teoría revolucionaria: quiere dar cuenta de la imposibilidad de generar una teoría revolucionaria completa. Lxs revolucionarixs tendremos que conformarnos con movernos y actuar solamente con fragmentos de ella.
Nuestros principios bilardistas nos dicen que no sirve de nada perder teniendo la razón. Tenemos que ganar, aunque sea sacrificando un poco los postulados. Tenemos que vencer, aunque sea haciendo un poquito de trampa. Tenemos que triunfar. Como sea.

martes, 19 de abril de 2016

La alianza obrera y campesina, la clave del triunfo en Turquía y Kurdistan


Una solución leninista al dilema de los sujetos sociales para la revolución de Kurdistan y Medio Oriente

Por Carlos Amarilla

La mayor crítica al proceso de Rojava se basa en el sujeto social y su dirección. Este proceso lo entendemos como revolucionario porque objetivamente lleva a una confrontación de clases, y la discusión sobre la dirección a veces ni siquiera llega a plantearse porque desde los más diversos grupos de  marxistas catalogados como “ortodoxos” se suele argumentar que “no hay clase obrera” o “sujeto social”  para un revolución socialista en Rojava, Kurdistán etc.

Por otro lado los grupos reformistas o partidos de conciliación de clases entre los que se encuentra el HDP de Turquía argumentan que la clase obrera es “aristocracia obrera” y tiene un nivel de vida y un chauvinismo que hacen que deje de caracterizarse como revolucionario a este sujeto social diciendo “Marx se equivocó”, justificando una política de conciliación de clases.

Haciendo un poco de historia Marx empezó su teoría desde los países que conocía, Alemania, Inglaterra, Francia en un tiempo y espacio determinado. Marx la eligió como sujeto social por ser la que mejor estaba organizada, por no tener medios de producción salvo su propio esfuerzo que a diferencia de artesanos y campesinos, este no poseía, y estaba calificado por su ROL PRODUCTIVO. Sin proletariado no puede haber burguesía y no es casualidad que la clase obrera se encuentre en los puestos claves del aparato productivo, ese mismo que se debe expropiar, controlar y planificar en perspectiva de una sociedad socialista.

Él mismo aclaró que no es la clase más explotada, lo mismo que diría Lenin en “El Estado y la Revolución”, hay clases más pobres, los desocupados, los campesino sin tierra, los marginados etc., pero por las razones antes expuestas la clase obrera tenía ese rol de “ENTERRADOR DE LA BURGUESÍA”.

Luego de escribir “EL CAPITAL”, Marx fue ampliando su visión sobre las colonias y de seguir vivo hubiera llegado a la misma conclusión que pudo terminar Lenin en su libro “Imperialismo Etapa superior del Capitalismo”.

Mientras tanto Trotsky el mejor dirigente del soviet de Petrogrado en la revolución rusa y clave para Lenin, al mismo tiempo que éste escribía su primera tesis sobre “La Revolución Permanente”, un desarrollo teórico sobre una evolución de los procesos revolucionarios que termina con la visión de una etapa burguesa inevitable hacia el socialismo, que la mayoría de los socialdemócratas de la época planteaban como necesaria previo al desarrollo de la tareas socialistas.

Claramente se planteaban en un tiempo donde todavía muchos que consideraban como progresiva a la burguesía en la lucha contra la monarquía y se discutía como se continuaría después de la caída de los zares y reyes. Parecía una discusión pírrica pero este tipo de discusiones serían las que en la revolución se confrontarán en la práctica.

En “La Revolución Permanente” Trotsky describe que lo más probable es que los levantamientos se den primero en los países atrasados antes que en los desarrollados por sus mismas contradicciones, donde el hilo se corta por lo más delgado, y ve a Rusia como firme candidato, pero siempre a condición que sea el comienzo de una serie de revoluciones que termine en los países más avanzados. (Éste sería el caso de Rojava-Kurdistán.)

Plantea que una vez tomado el poder se puede avanzar hacia tareas burguesas pendientes y socialistas, o sea simultáneamente. Empezando con la reforma agraria, la liberación nacional, la caída de la monarquía y a la vez con las colectivizaciones del campo, el control obrero y la planificación de la producción, expropiación de la burguesía y un sistema de democracia directa, donde los trabajadores sean los protagonistas en una dictadura democrática de obreros y campesino. Es decir de la mayoría de la población por sobre la minoría explotadora.

No solo eso, la Revolución Permanente en su segundo gran postulado deja abierto la hipótesis de que en una revolución obrera y campesina (o popular) todos los sujetos pierden su carácter capitalista original, cambian sus roles iniciales y con sus reformas y cambios éstos se pueden dar de una manera mucho más rápida porque ya no está el corset de la burguesía que le pone  límites a los cambios, se transforma de manera exponencial la sociedad.

Esto se vio en Rusia en los primeros años de la revolución donde en 1917 al 24 cuando se conquistaron derechos tales que todavía no se tienen inclusive en Argentina, como el aborto seguro legal y gratuito y otros que apenas se conquistaron cien años después como el divorcio, la libertad de género, guarderías gratuitas, etc. que fueron hechos en muy poco tiempo a través de duras discusiones en los Soviets y que se fueron perdiendo con el tiempo muchas de estas conquistas por  la burocratización a manos de Stalin. (La analogía con el proceso de Rojava no es casualidad, por eso lo extraordinario de su transformación social).

¿Puede negársele al pueblo kurdo el derecho a llamar revolución de carácter socialista a su situación por faltarle “sujeto social”? ¿Debe cuestionársele ese derecho? Los kurdos de Rojava, que tienen asambleas populares (o técnicamente soviets), que colectivizaron una gran porción de sus tierras, formaron cooperativas y simultáneamente organizaron autodefensas con el rol protagónico de la mujer: ¿Deberían esperar a la clase obrera turca, siria, iraní o irakí para poder avanzar?

¿O, como diría Trotsky deberían profundizar estas medidas para garantizar el triunfo de la revolución para que tenga un apoyo masivo y se haga  carne en el pueblo kurdo su revolución y lo defienda hasta la última gota de sangre, a diferencia de la guerra civil española que fue traicionada por los dirigentes de la Republica y el estalinismo?

"El ejército revolucionario debe, no solamente proclamar, sino llevar a término inmediatamente en las provincias conquistadas, las medidas más urgentes de la revolución social: expropiación y reintegro a los necesitados de las reservas existentes de productos alimenticios,..., redistribución de las viviendas en beneficio de los trabajadores y sobre todo de las familias de los combatientes, expropiación de la tierra y de los instrumentos agrícolas en provecho de los campesinos, establecimiento del control obrero de la producción y el poder soviético en el lugar de la antigua burocracia"

¿Se debe esperar que formen una burguesía… el obrero agrícola debería vestirse de proletario y ceder su plusvalía para poder “ser una revolución obrera”? Ni Marx, Lenin, Trotsky ni el Che Guevara plantearían estas cosas, sino que dirían que lleven lo más adelante posible las medidas transitorias al socialismo y extiendan la revolución a los países más avanzados.

Si no sucede eso, sería una etapa corta donde al no avanzar terminaría perdiendo todas sus conquistas y con suerte termine siendo una democracia occidental burguesa, con el agravante de que al estar rodeado de imperialismos y con tantos recursos sería un blanco constante de estos países súper militarizados contra las que deben luchar en desventaja, con las conocidas limitaciones de territorio, de su desarrollo productivo y aislamiento. Entonces terminarían siendo víctima de sus numerosos enemigos.

Es más, hoy por hoy Rojava tiene un tibio -aunque apoyo al fin- de EEUU en el espacio aéreo contra el Isis, que es también para ponerle límites a Erdogan. Sin embargo nadie podría garantizar que un cambio en su política y las negociaciones con estos imperios no dejen aún más vulnerables al reclamo kurdo.

Por el otro lado también se choca con la estrategia de partidos como el HDP, los autonomistas, los anarquistas, socialdemócratas, que ven en general a la clase obrera como  privilegiada, no solo en Turquía sino a nivel mundial, y en el caso turco el agravante del concepto chauvinista de esa clase.

La clase obrera turca desde 1980,  cuando sufrió el golpe de estado fue copada por una reaccionaria burocracia sindical represora y callada, por eso no deben ver con gracia la represión de sus hermanos de clase kurdos, al menos no la mayoría, ya que también sufre la represión del estado turco.

Lenin planteaba la “unión obrera y campesina“, indispensable para un triunfo que no solo sea para los kurdos sino para la clase obrera y popular de Turquía que a costa de ellos financia las aventuras de Erdogan, la represión kurda y puede causar una guerra de proporciones en la región.
Los paros generales con multitudinarias marchas demostraron que no es imposible la “unión obrera y campesina” después de los atentados de Suruc y Ankara.

No impulsar una política clasista en concordancia con el movimiento campesino kurdo significa renunciar a un cambio de sistema al dejar abierto el camino a la conciliación de clases y solo sería un reclamo parcial que poco cambiaría la situación de turcos y kurdos explotados y su reclamo quedaría con menos fuerza.

Y LO FUNDAMENTAL: HOY POR HOY SOLO LA CLASE OBRERA TURCA QUE DESPIERTE PUEDE PARAR CON SUS METODOS, HUELGA GENERAL, PIQUETES, TOMA DE FABRICAS A UN GOBIERNO QUE HACE RATO HA ENTRADO EN UNA VORÁGINE SIN CONTROL QUE PUEDE LLEVAR A MAYORES CALAMIDADES NO SOLO A TURQUIA Y KURDISTAN SINO QUE SUS ALIANZAS Y POLITICAS EN LA REGION PUEDEN EMPEORAR LAS BARBARIES YA COMETIDAS.

OTRAS OPCIONES SON LA INTERVENCION MILITAR DE RUSIA U OTRA POTENCIA QUE EN SU CAMINO NO DISTINGUIRAN CLASES NI LEYES, SERÍA UNA TRAGEDIA PARA TURQUÍA TODA. ES DEBER DE TODO REVOLUCIONARIO IMPULSAR UN MOVIMIENTO ANTIGUERRA Y COORDINAR LAS LUCHAS PARA QUE CAIGA ERDOGAN Y SEA EL PRIMERO DE UNA LARGA LISTA.

Otras opciones (electoral, pacífica, a través de las hipócritas UE, la ONU) son despreciadas por la misma AKP y Erdogan, más allá del deseo del pueblo kurdo y el HDP. ¿Alguien cree que puede haber un Kurdistán libre sin una revolución y una fenomenal crisis en Turquía o una derrota categórica del pueblo kurdo? Erdogan contesta con hechos que pretende hacer.

Y el argumento con el cliché de “la aristocracia obrera” quedo demostrado que quedo en el pasado con la convulsionada Francia.
Ya no hay más espacio para “aristocracias obreras” como lo fue previo a la primera guerra mundial, hay espacio para el ajuste y la represión inclusive en países imperialistas como Francia.

Y la verdad tienen  razones los obreros y estudiantes franceses de reaccionar, porque el ajuste va para financiar guerras bárbaras como en Siria, el Isis, regímenes como Erdogan e Israel y tratos inhumanos como los de Turquía-UE que son indignos para el género humano. Los procesos revolucionarios como las revoluciones son internacionales, sino que lo diga Marx hace más de 150 años.

Es más creemos que la resistencia de los kurdos que son los que mejor superaron la prueba por su organización a lo que se llamó la “Primavera Árabe” envalentonaron a los demás pueblos  con sus osadas colectivizaciones, transformaciones sociales y de género en un contexto tan crítico y no solo a Francia sino a la clase obrera mundial en un aventón positivo en medio de tanta reacción y derechización , a veces a pesar de sus direcciones mismas.

“El futuro llego hace rato” diría una canción. Estamos en una situación de ajuste, en Europa, Medio Oriente, pero también América Latina y Argentina que lo estamos sufriendo. El dilema de los “sujetos” ya queda en el pasado, entramos en era de lucha de clases y no debemos darle el gusto a los planes imperialistas de división de los explotados A  y los explotados B.

Puede ser que “falte sujeto” en Kurdistán, pero si hay alguna aspiración de triunfo de la misma debe extenderse y convocar necesariamente a las clases obreras para triunfar totalmente, sino esa hipótesis improbable que planteó Trotsky sobre una revolución que no sea encabezada por la clase obrera terminaría como lo describió en “un corto episodio en el camino a la revolución del proletariado”.

El gran acierto de Lenin y Trosky fue articular el reclamo campesino con el programa de la dictadura del proletariado y sin límites nacionales, por eso se extendió como un reguero de pólvora en los pueblos más allá de la Rusia original. Bandera de la URSS misma significo la sangre derramada del pueblo, el martillo representando a la clase obrera y la hoz al campesinado.

El “Che” Guevara es muy respetado en Kurdistán .”Una, dos ,tres Vietnam”, decía. El internacionalismo es la clave y más en Turquía alojando a varias naciones oprimidas adentro, por eso separar la lucha obrera turca y la campesina kurda al igual que el sirio, iraní, etc; no solo es un error, hoy por hoy son inseparables al igual que sus destinos.