sábado, 29 de abril de 2017

¿Frenar la invasión turca a Rojava de la mano de los yanquis o recurriendo a la movilización solidaria de los pueblos de todo el mundo, como en Vietnam?

La conducción del pueblo kurdo moviliza a sus bases para reclamarle al bandido Trump que frene a los bandoleros conducidos por el "Sultán" Recep Tayyip Erdogan. ¡Un camino que los conducirá a transfomar Rojava en una nueva versión del KRG  que es la "región autónoma" kurda de Iraq conducida por el agente del imperialismo Barzani.
Por Juan Giglio 

Según el sitio de informaciones kurdo Kohmnews, “El Movimiento por una Sociedad Democrática - TEV-DEM - la coalición de organizaciones que gobierna la región del norte de Siria denominada Rojava,  hizo un llamado a los poderes internacionales a participar activamente en el proceso imponiendo la prohibición de vuelos en la zona, de manera de evitar los ataques aéreos de Turquía contra el pueblo kurdo”.  

El dirigente del TEV-DEM Muhammad Hassan explicó a otra agencia - la rusa Sputnik - que “Luego de estas últimas agresiones, nosotros repetimos firmemente el llamado a la imposición de una zona libre de vuelos sobre el norte de Siria”. Y, dirigiéndose a los participantes de la reunión que tendrá lugar en los próximos días en Kazajtán, en la ciudad de Astana, les pidió que traten la posibilidad de acordar esto en la misma.

La semana próxima tendrá lugar una nueva ronda de negociaciones sobre la cuestión siria en esta localidad, en la que participarán funcionarios de Rusia, Turquía, Siria e Irán junto a expertos de las Naciones Unidas. A ellos, Hassan les exigió: “Queremos que los países más poderosos, como Estados Unidos, la Federación Rusa o la Unión Europea nos ayude para satisfacer esta demanda.”

Este reclamo atenta contra los intereses estratégicos del pueblo kurdo, ya que significa, en los hechos, la consolidación del desembarco de tropas yanquis en Rojava, que no están ahí para proteger los deseos autonomistas del Kurdistán Sirio o Rojava sino sus propios intereses, que tienen que ver con el control del área y el manejo de los recursos naturales, principalmente del petróleo.

Con esta política, la conducción kurda está haciendo retroceder el proceso revolucionario que dio un salto dos años atrás con la derrota de Estado Islámico en Kobane y, posteriormente, con la unificación de los cantones luego de la recuperación de Tal Abyad. Para que Estados Unidos cumpla con el pedido de los dirigentes de Rojava tendría que fortalecer su presencia en el lugar, enviando más efectivos y pertrechos.

De esta manera, los yanquis afianzarían su poderío político y militar, transformándose en carceleros del heroico pueblo kurdo. Por eso, Donald Trump, que tiene claro estos objetivos, no solo permite que continúen las agresiones fronterizas del ejército turco, sino que fue el primero en alentarlas, reconociendo rápidamente el triunfo fraudulento del dictador Erdogan en el Referéndum Constitucional y envalentonándolo para organizar la invasión a Rojava.

La única manera de defender los intereses del Kurdistán es recurriendo a la movilización de los trabajadores y los pueblos de todo el mundo, rompiendo los lazos políticos y militares con las potencias imperialistas antes que sea tarde, porque: ¡No habrá liberación nacional, social y de género con Estados Unidos y Rusia o sus agentes regionales como Barzani, Rohuani y Bashar al Assad, que son feroces enemigos de los pueblos!

Las milicias kurdas se han ganado un respeto enorme en todo el mundo debido a su heroica lucha contra Estado Islámico, que tuvo hitos magníficos en Kobane y Tal Abyad. Hay que apoyarse en esa autoridad para organizar una campaña de solidaridad internacional como la que se desarrolló durante la guerra de Vietnam. Gracias a esta las masas le ataron las garras a los dueños del mundo, facilitándole la victoria a los guerrilleros del Vietcom. 

El camino de las alianzas con el imperialismo convertirá a las conquistas de Rojava en papel mojado, lo más parecido a la “autonomía” que rige actualmente en el Kurdistán de Iraq, donde la única libertad que rige es la de los monopolios imperialistas para saquear el petróleo de la mano de los “peshmergas” de Barzani, un moderno virrey de los poderosos.

miércoles, 26 de abril de 2017

Erdogan ataca Rojava mientras Trump le allana el camino para la invasión. ¡Fuera turcos y yanquis de Siria!

Por Juan Giglio 

Mientras lo más granado de las milicias kurdas combate en el frente de Raqqa, lideradas en los hechos por los Estados Unidos, aviones turcos bombardearon Rojava y Sengal, un ataque que no podría haberse llevado adelante sin el acuerdo con las potencias, tal como lo expresó uno de los máximos referentes kurdos de la región, Salih Muslim.

En ese contexto, el portavoz de las YPG, Redur Xalil, que visitó el lugar de los ataques acompañado de un oficial estadounidense, afirmó que “las YPG no permanecerán en silencio frente a este ataque y por lo tanto, se reservan el derecho a defenderse y vengar a sus mártires”. También dijo que la Coalición “tiene una enorme responsabilidad y debe asumir su deber de proteger esta zona ya que somos compañeros en la lucha contra el Estado Islámico”.

Mark Toner, portavoz el Departamento de Estado, expresó que el gobierno de Donald Trump estaba “preocupado” por los bombardeos, aunque “entendía” que para Turquía el PKK era “una amenaza”, pero que esa “lucha” contra la guerrilla, que tiene sus bases en Qandil, no podía “ser en detrimento de nuestro combate común a los terroristas que nos amenazan a todos”. 

El reclamo de "protección" de parte de los dirigentes kurdos hacia EE.UU., tratándolos como“compañeros”, es más o menos como pedirle al zorro que cuide a las gallinas. Los yanquis no están en la región para liberar a los pueblos, mucho menos al Kurdistán, sino para reafirmar su dominio territorial y económico al servicio de los monopolios más poderosos del mundo.

En ese sentido, no son los kurdos sus aliados principales, sino Turquía, que siendo la segunda potencia de la OTAN continúa siendo un actor fundamental para los intereses estadounidenses, más allá de las contradicciones que existieron y continúan existiendo entre ambas partes. Por eso, en los hechos, turcos y yanquis trabajan en “equipo” contra los kurdos y demás pueblos en lucha.

Estados Unidos alejó del norte de Siria al grueso de las milicias en una guerra “final” contra Estado Islámico - que en los hechos está acabado - para abrirles objetivamente las puertas de Rojava a los turcos, que comenzaron a implementar sus planes de invasión luego del triunfo fraudulento del SI, que no casualmente fue saludado por Donald Trump, como una “victoria de la democracia”.

El pueblo kurdo debería concentrar su poderío - que no es poco - en las tareas de la defensa de Rojava y Sengal, llamando a la solidaridad internacional a los únicos sectores dispuestos a apoyarlo consecuentemente: los trabajadores y los pueblos oprimidos de todo el planeta, que tienen a los yanquis - liderados por el fascista Trump - como su principal enemigo. 

¡Basta de acuerdos con los masacradores del pueblo sirio y kurdo – Trump, Bashar al Assad, Putin, Rohuani y demás asesinos – por la construcción de una alianza estratégica con los revolucionarios y las revolucionarias de todo el mundo para defender los cantones de Rojava, que a pesar de los vaivenes, vacilaciones y capitulaciones de sus dirigentes, constituyen una gran conquista para el conjunto de la humanidad oprimida y explotada.